4/2/13

La inseguridad que da vergüenza



En el clásico entre Juventud y Gimnasia, hinchas antonianos causaron destrozos en el alambrado que dividió la popular de la platea... incluso hubo proyectiles. ¿Y la policía?



¿Una vergüenza? Así hay que calificar los hechos de barbarie... no creo. Actos de vandalismo, irresponsabilidad, delincuencia y patoterismo. Son los calificativos más adecuados para un grupo de violentos disfrazados de hinchas que ayer cubrieron el sector de populares de la parcialidad de Juventud.

Cuando el partido llegaba a su Ecuador, los hinchas destrozaron el alambrado divisorio y estaban dispuestos a ingresar a la platea donde gente de Gimnasia había respondidos a los cantos agraviantes que le dedicaban algunos hinchas de Juventud.

La situación tuvo ribetes de dramatismo y no sólo por la cantidad de gente que podía cruzar al otro lado sino porque volaban cosas de un lado a otro que le costó por ejemplo varios traumatismo a gente de Gimnasia que estaba en la platea y que recibieron entre golpes de piedras hasta el de una botella de vidrio.

La pregunta es ¿cómo pasaron estos elementos? El operativo fue muy grande, pero siempre falta en los lugares más críticos. 

Cuando los clubes están pidiendo de que la policía le baje el tema de aranceles, desde la policía se discute la cantidad de personas... pero nadie habla de la efectividad de un dispositivo de seguridad... ya que no podría haber pasado nadie con piedras y botellas, porque no deberían haber roto el alambrado, porque no deberían haber llegado al enfrentamiento efectivo... eso significa que el operativo es malo, no por la cantidad sino por la calidad de los policías que están en servicio.

Todo el mundo sabe que el partido es de alto riesgo, pero si en la cancha se los ve a los uniformados viendo el clásico, o mandando mensajitos de texto, poco podemos creer que ellos están vigilando para sofocar las amenazas apenas se manifiestan.

Lamentablemente el operativo falla y falla seguido y mucho más cuando se va a charlar sobre costos y personal. Muchos, en la policía, ven al operativo como un adicional, y no como una medida de prevención... además convengamos que en esta altura del año los adicionales se multiplican ante una población que está de vacaciones.

Por lo tanto un uniformado puede haber cumplido su horario... adicionó en el corso, al otro día en la carpa y finalmente se ven en la obligación de prestar su presencia en el fútbol... y ojo que hablamos de presencia y no de accionar.

El operativo falló y lamentablemente para el usuario (público y dirigentes) es aceptar o acetar todo lo que le den... porque de lo contrario no hay fútbol... linda forma de presionar ¿no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario